Nada más tuve un viaje al trabajo horrendo que me sirvió de inspiración para esto (?)
Cuando se viaja en colectivo en hora pico, por lo general nunca jamás de los jamases se va a encontrar un asiento libre. Si se encuentra corremos cual Forest Gamp a ocuparlo, pero como no suele ser el caso uno se conforma con ubicarse en los lugares donde parece ser más probable que la gente se baje.
A lo largo de mi vida en el transporte público fui tomando nota (y supongo que no soy la única) de una serie de indicios que quien se baja nos da a los pobres que estamos parados. A saber:
- Buscar las llaves. Pasajero que revuelve la cartera/bolsillo y saca un juego de llaves va a estar rodeado automáticamente por un grupo de pasajeros que según la hora y el grado de dormidez bien podrían parecerse a zombies buscando cerebros.
- Tener mochila. Al menos yo, suelo custodiar muy celosamente el asiento de portadores de mochilas en las paradas cercanas a colegios.
- Guardar el MP3. Si lo guarda es que se baja. TIENE que bajar.
- Despertarse. Por eso del GPS interno, dicen que la gente que duerme en el bondi se despierta cuando sabe que llega su parada (?)
- Guardar los apuntes.
- Ponerse los lentes de sol
- Abrigarse/desabrigarse, según la época del año.
- Ser de los que usan traje en paradas cercanas a las estaciones de subte.
Y otras tantas que me debo estar olvidando.
De cualquier forma, ni eso alcanza. Siempre está el que no respeta esas simples reglas y saca la llave cuando le parece, o al que el MP3 se le queda sin pila, o al que le pareció una idea re copada ir de traje a la facultad. Y nuuuuunca falta la viejita que aparece al lado nuestro jusssssto cuando ese asiendo que estábamos custodiando se desocupa, o el forro que acaba de subir y que se pone en esa posición estratégica que lo habilita para robar un lugar que por derecha, por izquierda y por el tiempo que hace que subí era MIO ¬¬.
Entonces hoy, después de que toda mi atenta observación de señales no de frutos, de que dos viejas se materializaran a mi lado cuando la observación no fue inútil y de que tres forros paracaidistas robaran MI asiento, me acordé que más de una vez fantaseé con subir al colectivo y preguntarle a la gente donde se bajaba, para no perder mi tiempo esperando por un asiento que no iba a llegar, y más de una vez quise decirle a alguien que esperaba que yo me baje 'flaco, tengo para rato'.
Como esto puede incomodar a más de uno, o dar a entender que a uno le falla un poco, se me ocurrió lo siguiente:
Cuando uno sube al colectivo debería colgarse un cartelito que indique su parada de destino.
Así todos los que subimos sin esperanza de sentarnos, al menos sabríamos donde NO hacer guardia.
Y a quien no le pasó estar todo el viaje esperando ESE lugar, y que se desocupe cuando decidimos que no vale la pena y nos fuimos más al fondo, sólo para dejárselo a ese que acaba de llegar? Eso también es evitable!
Basta de especulaciones!
Por un transporte público más justo, usá tu cartelito.
